Materiales necesarios
-Guantes , gafas de protección, delantal o bata.
-Un molde o recipiente plástico.
-Una batidora tipo tourmix o minipimer.
-130gr de sosa caústica en perlas
-375ml agua
-1l de aceite de oliva virgen
Los guantes, gafas de protección y bata o delantal sirven para nuestra protección ya que la sosa caústica una vez mezclada con el agua es un producto áltamente corrosivo que puede producirnos graves quemaduras.
El molde debe ser plástico o en su lugar cualquier caja de zapatos o de madera forrada ya sea con plástico incoloro en el primer caso o con papel de horno en el segundo.
No utilizar moldes de aluminio puesto que entran en reacción con la sosa caústica.
Si se pueden utilizar moldes de acero inoxidable.
Es conveniente forrar los moldes para que la extraccion posterior del jabón sea facil y sencilla.
Paso 1
Disponer el agua en un recipiente de acero inoxidable, verter la sosa y con cuidado remover hasta su disolución. No aspirar los humos ni acercar la cara al recipiente por seguridad.
Esperar a que la solución se enfrie completamente.
Paso 2
Disponer el aceite en un recipiente de acero inoxidable o cubo plástico.
Cuando la sosa está a temperatura ambiente verter poco a poco e ir mezclando con la batidora a una velocidad media.
El jabón estará listo cuando alcance una textura un poco mas suave que la de una mayonesa, si sacamos la batidora y podemos escribir con las gotas que caen en la superficie el jabón ya ha alcanzado el punto de traza y está listo para verter en el molde
Es el momento de añadir arcillas, extractos, aceites esenciales, o cualquier planta molida deseada.
Una vez en el molde se deja reposar 24 o 48h al abrigo ya que es necesario que se mantenga la temperatura que alcanzará después para una buena saponificación.
Transcurrido ese tiempo se saca del molde, se corta en porciones y se deja secar a cubierto durante quince dias o mas con el objeto de que termine el proceso de saponificación y se evapore la sosa restante.
El jabón de Castilla puro elaborado solo con aceite de oliva no resulta tan espumoso como el jabón comercial.
Si se desea que produzca más espuma algunos aficionados añaden un poco de azucar a la solución de sosa cuando esta está fria pero hay que tener en cuenta que este aditivo provoca que obtengamos un jabón más blando y por tanto más proclive al enranciamiento.
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