Los aceites esenciales

Los aceites esenciales son la suma de propiedades de una planta, tanto aromáticas como terapéuticas si las hubiera. Con ellos se han elaborado perfumes y medicinas desde tiempos antiguos constituyendo una parte muy importante de la antigua alquimia.
Hoy en día resurgen con fuerza debido a terapias que parecen innovadoras como la aromaterapia pero que en realidad ya llevan cientos de años rondando por el mundo del hombre.
Su administración terapéuticas vía interna solo debe ser efectuada por terapeutas especializados debido a su potencial peligrosidad.
Los aceites esenciales jamás deben ser empleados sin diluir ( excepto algunos ejemplos puntuales), pueden ser potentes irritantes de la piel de ser utilizados de manera incorrecta.
Expertos productores de aceites esenciales recomiendan una dilución del 10% tanto para apreciar las características aromáticas como para asegurar una seguridad en su uso. Y aun así hay casos puntuales cuyo uso está desaconsejado por su alta toxicidad.
No obstante la lista de aceites esenciales existentes es interminable y en esto pasa como con las setas, los ejemplares venenosos son pocos y muy localizados, otros son ligeramente tóxicos y otros son terapéuticos y no dañinos para la salud.

Los aceites esenciales de plantas y flores se obtienen básicamente por medio de dos procesos diferenciados : la destilación en alambiques y el enfleurage.
Aquellas flores cuyos aceites esenciales son mas volátiles o delicados son tratadas mediante el proceso de enfleurage.Es decir se maceran en grasas provocando un proceso de transferencia del aceite esencial de la flor hacia la grasa o aceite. Las flores se van recambiando y cuando se obtiene la concentración necesaria se mezcla la grasa resultante con alcohol iniciando un segundo proceso de transferencia. Este último producto se destila obteniendo un aceite absoluto y un concreto ( el resto de grasa que queda).
La destilación simple consiste en obtener aceites esenciales directamente con la introducción de las plantas o flores en un alambique. La función del alambique consiste en la obtención mediante la evaporación del aceite esencial. Durante el proceso, debido a la diferencia de densidad entre el vapor de agua y el aceite evaporado, se se separa el contenido en agua de la planta y el aceite esencial depositando este último en un recipiente final.

A la hora de adquirirlos debemos fijarnos en que su denominación sea la de aceite esencial, los aceites perfumados no son aceites esenciales, son compuestos químicos diluidos en una solución de alcohol o Miristato de isopropil ( un alcohol derivado del ácido mirístico).Lo mas seguro es dirigirse a una herboristería o comercio especializado.